Hay dos grandes puntos de inflexión psicológicas en niños con microtia.
La primera se produce en torno a primero de primaria. Esta es la primera vez que están de forma continua en presencia de grandes grupos de compañeros y, como tal, se vuelven totalmente conscientes de su propia imagen. Si recuerdas este momento de tu vida, te acordarás de que te comparas con tus compañeros de clase para formar un concepto de imagen corporal.
En este periodo pueden empezar las burlas, que haría que por primera vez un niño con microtia pueda sentirse diferente.
La seguridad y normalidad que los padres le hayáis mostrado le ayudarán a contrarrestar posibles burlas. De todas maneras, si aparece cualquier burla de manera reiterada será necesario hablar con la escuela y para atajarla en seco.